Arte urbano en los contenedores de Chimbacalle

El barrio de Chimbacalle se llenó de mucho colorido y arte urbano con el inicio del plan piloto “Arte y Conciencia”, cuyo objetivo principal es que jóvenes artistas urbanos se expresen sobre temas relacionados con el cuidado del ambiente y del bien público, en los contenedores que tiene la Empresa Pública Metropolitana de Aseo en diferentes sectores del DMQ.

En el sector, ubicado al sur de Quito, alrededor de 20 contenedores fueron pintados con diferentes tipos de mensajes. La iniciativa busca que la comunidad se empodere del bien público, que los usuarios cuiden los contenedores y sean corresponsables respetando los horarios de recolección, para mantener siempre limpio y en orden su barrio.

La gerente de EMASEO EP, Yolanda Gaete, resaltó que “esta iniciativa pretende contribuir al ornato de la ciudad; generando un cambio de actitud frente a los residuos sólidos y al equipamiento urbano. Invito a la empresa privada a que también se una a esta campaña, con su apoyo replicaremos esta iniciativa en otros barrios de la ciudad”.

El trabajo interinstitucional entre la Empresa Pública Metropolitana de Aseo y la Secretaría General de Coordinación Territorial y Participación Ciudadana, permitió que 20 jóvenes artistas urbanos (que forman parte del voluntariado “Quito Acción”) tengan un nuevo espacio para mostrar sus destrezas. Con el uso de sprays, brochas y pintura acrílica, transformaron los contenedores de residuos sólidos domiciliarios de Chimbacalle en verdaderas obras de arte.

Bullet D Sánchez, representante del colectivo “Pumasqui”, se dedica al arte como soporte social para jóvenes, “esta es una buena iniciativa para recuperación de los barrios, ahora los contenedores son galerías para el deleite de la comunidad” expresó.

Oscar Tambi, del colectivo “T_bros”, agradeció a las autoridades por el inicio del plan piloto Arte y Conciencia, “es muy interesante esta iniciativa… de esta manera concientizamos a los vecinos a cuidar el ambiente, con este lienzo urbano vamos a educar sobre el correcto uso del contenedor”. 

Varios habitantes del sector se mostraron complacidos con el trabajo que desarrollaron cada uno de los artistas y se motivaron a cuidar el bien público, porque, según indicaron, los contenedores ahora, además de ayudarlos con el manejo de residuos sólidos, también embellecen el sector.  

Evelyn Viteri, habitante del barrio, enfatizó que “la ciudadanía debe ayudar cumpliendo los horarios de recolección y desechar la basura dentro del contenedor, ahora han quedado lindos con las pinturas”.

Es importante indicar que, pese a que por aproximadamente 6 meses estuvo vigente el estado de excepción, alrededor de 300 contenedores sufrieron daños por diferentes causas, ya sea por choques, incendios, desmantelamiento, vandalismo; además de deterioros en los mecanismos de apertura y cierre por la mala manipulación. Muchos de esos contenedores averiados están siendo cambiados en diferentes zonas del Distrito Metropolitano de Quito.