Hace 42 años, la UNESCO declaró a la ciudad Quito como Patrimonio Cultural de la Humanidad, por tener uno de los Centros Históricos mejor conservado en América Latina. Lamentablemente, los ciudadanos no respetan ni valoran este sitio turístico, que es admirado por el mundo.

Recolección de residuos sólidos

El irrespeto al espacio público y la mala conducta de algunos habitantes ha afectado la imagen de este lugar. La Empresa Pública Metropolitana de Aseo tiene identificados 185 puntos críticos y 43 puntos húmedos en la Administración Manuela Sáenz, perteneciente al Centro Histórico.

“La gente es muy indisciplinada, no toman conciencia; botan la basura donde pueden; no respetan la ciudad y esto es lamentable”, enfatizó Jeaneth Zambrano, comerciante del sector La Ipiales.

Los servicios de EMASEO EP se refuerzan constantemente en esa zona, con la finalidad de mantener los espacios públicos limpios y en orden. Cerca de 180 “soldados azules” trabajan arduas jornadas con el propósito de preservar la salubridad de este sector, visitado por propios y extraños.

Para evitar la acumulación de desechos se han diseñado 39 rutas, que recorren en diferentes horarios (diurno, vespertino y nocturno) el Centro Histórico. Barrido manual y mecánico, recolección a pie de vereda y diferenciada (a través de las 41 islas soterradas) e hidrolavado, son los servicios que se brindan para el beneficio de la comunidad.

“En 2020, solo en este sector, se recolectó 53.859 toneladas de residuos; es decir, diariamente se recoge en promedio 150 toneladas. Los desechos más comunes son: residuos de alimentos, poda y los reciclables (plásticos, metal, vidrio, papel y cartón), generados en su mayoría por habitantes y propietarios de los distintos negocios ubicados en la zona”, mencionó Yolanda Gaete, gerente de EMASEO EP. Con el objetivo de informar a la ciudadanía sobre las sanciones contempladas en el Código Municipal se realizan socializaciones en diferentes puntos. Además, se exhorta a los habitantes, comerciantes, transeúntes y turistas del Centro Histórico a respetar el espacio público, las frecuencias y horarios de recolección, ya que juntos debemos mantener limpio nuestro Patrimonio Cultural y proyectar al mundo un Quito lleno de luz.